[cs_content][cs_element_section _id=»1″ ][cs_element_layout_row _id=»2″ ][cs_element_layout_column _id=»3″ ][cs_element_text _id=»4″ ][cs_content_seo]\n\n
[/cs_content_seo][cs_element_headline _id=»5″ ][cs_content_seo]RONALD VARGAS: “CUANDO UNO QUIERE ALGO CON MUCHA INTENSIDAD, NINGÚN UN SACRIFICIO ES DEMASIADO GRANDE”\n\nSubheadline space\n\n[/cs_content_seo][cs_element_text _id=»6″ ][cs_content_seo]Se dice que algunas personas nacen con un destino casi marcado en la vida, y es que sus talentos parecen llevarlos directamente a su lugar en el mundo. Este el caso Ronald Vargas, un futbolista venezolano, que a pesar de su evidente talento, dice haberla luchado mucho y que sus mayores éxitos casi siempre vinieron después de varios fracasos.
“Llegué tarde al fútbol organizado”
Vargas no siempre tuvo claro que quería ser futbolista, de hecho, desde pequeño era alguien al que se le daban bien casi todos los deportes “Era un niño intranquilo y eléctrico, jugaba de todo… armaba una cancha de fútbol con un policía acostado y una lata … jugaba futbolito y béisbol con cualquier palo de escoba y una pelota de periódico con teipe”. Sin embargo, el deporte rey lo flechó en un partido “Yo jugaba futbolito y conocí a 3 amigos que pertenecían al equipo (de fútbol) del pedagógico… Un día en un partido me prestaron un uniforme y ganamos 3 a 2, yo metí 2 goles y ahí nació todo. Se me prendió el bombillo y dije esto me gusta”.
Su primer equipo grande fue nada más y nada menos que el Caracas Fútbol Club, organización a la que dice deberle gran parte de su éxito, ya que le dio todas las facilidades para que pudiera entrenar, inclusive fue firmado como jugador sub 20 cuando aún era sub 17. El delantero y mediocampista, nos cuenta que estar en este equipo era prácticamente una locura “Era casi que la mitad de la selección de Venezuela en ese equipo… fue algo que fue bueno porque te entrenabas con gente madura, grande e internacional inclusive, entonces era un aprendizaje super interesante”
“Es un deporte que va muy rápido”
Al igual que otros atletas, Vargas nos comenta que el fútbol es un deporte en donde se tiene que vivir el día a día. Y es que en uno de sus mejores momentos, una suspensión por dopping casi lo saca de la cancha para siempre “Estaba jugando en un nacional con distrito y me pusieron una inyección, no me la pusieron solo a mí, se la pusieron varios y luego jugamos con la selección en Colombia. Era una inyección que no estaba permitida… al volver me dicen que estaba suspendido”
La suspensión lo mantendría al menos un año fuera del fútbol, y de manera un poco nostálgica, comenta que esto pudo haber sido su salida del deporte, sin embargo el destino tenía otros planes para el “A pesar de no poder jugar ese año, el Caracas me ofreció un contrato. Yo creo que sin eso quizás no habría jugado más, porque en tanto tiempo puede que te inscribas en la universidad o te dediques a otra cosa… Ahí fue, donde después que ellos me apoyaran dije que esta sería mi profesión”
“Para mí venir a Europa era más bonito y más importante”
Luego de brillar en Venezuela, tanto en el Caracas como en la selección, el tren de la internacionalización llegó a su vida. Diferentes ofertas cayeron para el joven talento e importantes clubes latinoamericanos se mostraron interesados en hacerse con su ficha, pero Vargas se la jugó por su sueño “Tenia ofertas en Colombia y en México, pero futbolísticamente yo quería dar el salto para acá (Europa) era hasta histórico, para mí eso era más bonito y era más importante, aunque económicamente la oferta era más baja”
Su primer equipo internacional fue el Brujas de Bélgica, club con el que cumplió su sueño de jugar en una de las competiciones europeas más importantes del mundo, La Europa League. Posteriormente, pasó al Anderlecht, luego jugó con el AEK Athens en Grecia y actualmente se encuentra de regreso en Bélgica con el K. M. S. K. Deinze, donde milita en la posición de delantero.
De su proceso de internacionalización, comenta que lo más difícil es la adaptación y que por ello, al abandonar las canchas le gustaría poder ayudar a otros futbolistas en ese proceso, que ha hecho que muchos tiren la toalla “Son costumbres, cultura, comida, idioma, es el clima, es la mentalidad y el estilo de juego… hay muchos factores, no es solo el talento”
Hoy con 34 años de edad y con mucho fútbol aún por demostrar admite que cuando uno quiere algo con mucha intensidad, ningún sacrificio es muy grande y por ello se ha mantenido firme y ha logrado consolidarse en el fútbol extranjero. También reconoce que cada día el nivel de exigencia es mayor y dice que a pesar de la experiencia no se puede bajar la guardia “Si no te montas en el nivel estos jóvenes te comen”
Entrevista: Jeremías Álvarez
Redacción: Mariel Gorrin\n\n[/cs_content_seo][cs_element_line _id=»7″ ][cs_element_headline _id=»8″ ][cs_content_seo]SIGUE LEYENDO\n\nSubheadline space\n\n[/cs_content_seo][cs_element_layout_row_2 _id=»9″ ][cs_element_layout_column_2 _id=»10″ ][cs_element_layout_div _id=»11″ ][cs_element_layout_div_2 _id=»12″ ][cs_element_image _id=»13″ ][/cs_element_layout_div_2][/cs_element_layout_div][/cs_element_layout_column_2][/cs_element_layout_row_2][cs_element_line _id=»14″ ][cs_element_headline _id=»15″ ][cs_content_seo]COMPÁRTELO EN TUS REDES SOCIALES\n\nSubheadline space\n\n[/cs_content_seo][/cs_element_layout_column][/cs_element_layout_row][/cs_element_section][/cs_content]
